No necesitas ser un experto en moda para lucir
profesional. Sigue estos consejos para tener una imagen que te ayude a
impresionar.
Los emprendedores ocupan
muchas horas en su educación y networking, tomando talleres, clases y
prácticamente cualquier cosa que los ayude a mantenerse competitivos. Sin
embargo, la mayoría deja al margen su imagen física.
Nunca subestimes el poder de
tu imagen. Cuando te vistes de manera profesional y demostrando seguridad se
crea una gran diferencia. En cambio, cuando te vistes de forma descuidada
envías un mensaje de que tu confort es más importante que tus clientes,
inversionistas, socios y empleados.
Sí, lo importante es lo de
adentro; pero, tristemente, no funciona así el mundo de los negocios. Todos los
seres humanos hacemos juicios rápidos de las personas con las que interactuamos
a lo largo del día. Y tu apariencia contribuye a las opiniones de los demás
sobre ti.
A continuación te
compartimos siete consejos para proyectar una imagen profesional (y ganadora)
en el trabajo:
1. Evita las arrugas y la
falta de botones. Inspecciona tu ropa con regularidad y cuélgala o guárdala
inmediatamente después de usarla. Si notas que le falta un botón, cóselo o
llévalo a la sastrería.
2. Mantén tu ropa y zapatos
en buenas condiciones. Hazte amigo de tu tintorería, zapatería y sastrería
local. Los detalles son los que hacen la diferencia entre tú y tus
competidores.
3. Cuida tus uñas. Todo el
mundo observa las manos. Mantén tus uñas limpias y cortadas. Las uñas son un
indicador de que prestas atención al detalle, también en el trabajo.
4. No escatimes en los
zapatos. Sólo tienes un par de pies, así que compra los mejores zapatos que
permita tu presupuesto. Asegúrate que tu calzado siempre esté limpio y boleado.
Si los tacones o las plantas están maltratados, repáralos. Para los hombres, es
recomendable que compren hormas de madera que ayudarán a mantener la forma del
calzado y a controlar el olor y absorber la humedad.
5. Presta atención a tus
accesorios. Invierte en accesorios útiles y de alta calidad. Siempre lleva
contigo un buen bolígrafo, un maletín o portafolio, y una funda de piel para tu
tablet o notepad.
6. Ten un buen saco a la
mano. Cuando usas un saco parece que estás listo para los negocios. Guarda un
saco de color oscuro en tu oficina o en tu auto. Te servirá en caso de que te
llamen a una presentación importante o a una reunión inesperada con un cliente.
7. Vístete para la comodidad
de tus clientes, no para la tuya. Evita las prendas muy apretadas, cortas,
flojas o demasiado reveladoras. Si no estás seguro de que algo es apropiado,
simplemente no lo uses. Si no te queda bien una prenda, dónala.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario